Repsol, un aliado

Plataforma 03
Ilustración: RICARDO POLO

Desde hace 35 años y a 52 kilómetros de la costa de Tarragona, la plataforma Casablanca produce crudo mirando al mar. Un mar compartido con los pescadores. Este es el germen de una relación que no siempre fue fácil, pero que sus protagonistas, Repsol y las Cofradías de Pescadores, han sabido darle la vuelta para convertirla en una historia de alianzas, colaboración y respeto mutuo.

Final de premio

Empecemos por el final. El pasado 7 de noviembre, en el marco de la Fiesta de la Pesca Catalana 2016, Antonio Brufau, Presidente de Repsol, recibía la Placa de la Pesca Catalana. Un reconocimiento a Repsol por sus actuaciones a favor del sector pesquero que supone mucho para quienes trabajan día a día y desde hace años por forjar esta alianza.

“Para nosotros este premio es muy importante, porque nuestra relación con los pescadores fue inicialmente complicada y de desconfianza; estábamos destinados a compartir un espacio económico y ellos entendían que nuestra plataforma les perjudicaba porque, por seguridad, se establece un espacio de exclusión alrededor. Sin embargo, en los últimos años, a base de hablar, hablar y hablar, todos nos hemos convencido de que, en lugar de estar de espaldas, lo mejor es ir de la mano y colaborar para aprovechar sinergias y esfuerzos”, nos cuenta Josep Bertran, responsable de Comunicación de Tarragona.

“Y tan importante es para nosotros que fue el propio Presidente de Repsol quien recogió la distinción, la más relevante que se da en el sector de la pesca, demostrando así nuestro compromiso con este colectivo y la importancia que hemos dado a esta distinción”, enfatiza.

Diálogo y acuerdos

¿Cómo se materializa esta alianza? Josep nos cuenta que, a través del diálogo abierto y sincero, se ha ido construyendo esta relación de ayuda mutua. “Hemos creado un foro de encuentro donde canalizar cualquier duda, problema o reclamación por ambas partes y todos hemos asumido el compromiso de dialogar e intentar siempre llegar a acuerdos”.

Así, en 2012 se firma el primer convenio entre la Federación de Cofradías de Pescadores de Tarragona y Repsol, que luego se amplió con otro posterior. En la práctica, se traduce en un compromiso mutuo. Los pescadores prestan su colaboración en determinadas operaciones que deba realizar Repsol, por ejemplo, en el despliegue de barreras de contención o en el aviso a embarcaciones que se aproximen a la zona de navegación restringida; o delimitando una zona de exclusión si hay que realizar una tarea de mantenimiento submarino en la plataforma; o hacer turnos para evitar el tráfico de embarcaciones que arrastran redes por el fondo del mar si es preciso que el agua no esté turbia para alguna tarea específica.

Por su parte, Repsol brinda apoyo y recursos a las cofradías para organizar actividades formativas para los pescadores o iniciativas culturales para sus miembros, entre otras. Otro ejemplo de esta colaboración es la colocación de una antena de telefonía móvil en la plataforma de Repsol para mejorar las comunicaciones en alta mar de los pescadores, permitiendo el uso de teléfonos móviles convencionales, o que estas instalaciones marinas sean punto de auxilio para los pescadores.

Por los pescadores

Quizás el mayor orgullo de este reconocimiento para Repsol sea de dónde viene. “La Placa de la Pesca Catalana ha sido concedida a la compañía por la Generalitat de Catalunya, pero a propuesta de la Federación Nacional Catalana de Cofradías de Pescadores a través de una decisión unánime, es decir, los pescadores de Tarragona, Barcelona y Girona estuvieron de acuerdo en darle a Repsol esta distinción”, explica Josep con orgullo.

REPSOL RECIBE UN PREMIO POR SUS ACTUACIONES A FAVOR DEL SECTOR PESQUERO

Algo que también ha querido dejar claro Eusebio Francisco Rosales, Presidente de la Federación Territorial de Cofradías de Pescadores de Tarragona, en la entrega del premio: “El clima de entendimiento que existe en las relaciones entre Repsol y los pescadores propició que hiciéramos esta propuesta. Lo que se puede imaginar como una relación conflictiva entre una compañía energética y los pescadores, Repsol ha sabido convertirlo en una relación de entendimiento y colaboración, que creemos que debe ser un modelo para las grandes empresas. Es por ello que hoy los pescadores vemos en Repsol un aliado”.