Descubriendo la Inteligencia Artificial Generativa en Repsol
Preguntarle a una IA generativa como ChatGPT qué es una IA generativa puede ser un juego de espejos interesante. Pero si queremos saber de primera mano cómo Repsol está aplicando esta tecnología disruptiva en sus operaciones, lo mejor es hablar con quienes están en el corazón de esta transformación. Julia Díaz, responsable de Data Science, es una de esas figuras clave. En esta entrevista, nos proporciona una perspectiva exclusiva acerca de cómo la inteligencia artificial impulsa la innovación y facilita el desarrollo de soluciones integrales.
Julia, para empezar, ¿podría explicarnos qué es la inteligencia artificial generativa?
La inteligencia artificial generativa (IAG) es una rama de la inteligencia artificial (IA) que crea contenidos nuevos y originales a partir de datos. La IAG usa algoritmos que aprenden de los datos y generan resultados que se asemejan o superan a los datos originales en calidad, estilo y diversidad. Por ejemplo, la inteligencia artificial generativa puede crear imágenes de paisajes ficticios, textos que imitan a un autor famoso, música que sigue un género musical, etc.
"La integración de la IAG en Repsol ha aportado beneficios medibles en cada línea de trabajo durante este primer año de actividad del Centro de Competencia"
¿Cómo se aplica la IAG en el contexto de Repsol?
Hemos sido pioneros en el sector energético europeo al crear hace más de un año un Centro de Competencia de IAG que se está centrando en 5 líneas de trabajo: evaluar la eficacia y el impacto de las herramientas que ayuden a mejorar la productividad de los empleados; impulsar la generación de ideas de casos de uso operacionales y transformacionales, priorizarlas y acelerar su desarrollo; valorar y ejecutar el despliegue de la IA Generativa en el desarrollo de software en Repsol; asegurar la utilización legal y responsable de la IA a través de mecanismos y herramientas, y definir una estrategia para establecer el modelo de relación y la experiencia de la IA Generativa en Repsol.
Implementar nuevas tecnologías siempre conlleva desafíos. ¿Cuáles han sido los principales obstáculos que Repsol ha enfrentado al adoptar la inteligencia artificial generativa y cómo los ha superado?
La adopción de la inteligencia artificial generativa por parte de Repsol ha encontrado retos importantes, pero muy similares a los encontrados por otras empresas, como la falta de datos de calidad, la resistencia al cambio, la falta de habilidades técnicas y la necesidad de integrar la IA en los procesos existentes. Estos desafíos se han afrontado mediante la inversión realizada en formación, la mejora de la calidad de los datos y la colaboración con expertos en IA.
En términos prácticos, ¿cuáles son las principales ventajas que ha observado Repsol al integrar la inteligencia artificial generativa en sus operaciones? ¿Cómo ha influido esto en la productividad y en la calidad del trabajo?
La integración de la IAG en Repsol ha aportado beneficios medibles en cada línea de trabajo durante este primer año de actividad del Centro de Competencia. Con la implantación de nuevas formas de trabajo, los 300 usuarios que han participado en el primer piloto han logrado un 16% de mejora de los entregables y más de 120 minutos de ahorro de tiempo semanales. Se está trabajando en cerca de 50 casos de uso que representan cerca de 2 millones de euros de CAPEX [la inversión en activos fijos para generar beneficios a largo plazo] en ejecución. Se han generado más de 200.000 líneas de código en 20 lenguajes de programación diferentes. Y se han establecido seis principios rectores para el uso responsable de la IA, ya sea generativa o no generativa.
"La IAG puede emplearse para crear nuevos productos y servicios más sustentables y eficaces, lo que puede favorecer el crecimiento a largo plazo de la empresa"
¿Cómo contribuye el uso de la inteligencia artificial generativa a los objetivos de sostenibilidad y crecimiento a largo plazo de Repsol? ¿Hay algún impacto directo sobre la reducción de costes o la eficiencia energética?
La inteligencia artificial generativa puede aportar beneficios a la eficiencia, la descarbonización y la competitividad de Repsol de diversas formas. Por ejemplo, puede facilitar la optimización de procesos y la reducción de costes, lo que puede repercutir positivamente en la eficiencia energética y la reducción de emisiones. Asimismo, la IA generativa puede emplearse para crear nuevos productos y servicios más sustentables y eficaces, lo que puede favorecer el crecimiento a largo plazo de la empresa.
Con respecto a la toma de decisiones, ¿ha permitido la inteligencia artificial generativa obtener impactos o descubrimientos que antes no eran posibles? ¿Podría darnos algún ejemplo concreto?
La IA Generativa puede facilitar el acceso a la información y fomentar una nueva era de creatividad y arte sin límites. Nuestro desafío es aprender nuevas formas de trabajo desaprendiendo las antiguas. Por ejemplo, a partir del histórico de incidentes, generar material divulgativo sobre seguridad; a partir del análisis de las reclamaciones, obtener puntos de mejora, respuestas automáticas y errores frecuentes; crear una herramienta que avise de la capacidad disponible en los nudos de la red española para aprovecharla; apoyar a los gestores remotos multienergía con argumentos relevantes para el cliente en cada fase de la llamada; analizar documentos jurídicos, comparar contratos y normas, proponer mejoras de cláusulas, traducir textos a lenguaje jurídico.
Mirando hacia el futuro, ¿cómo ve el papel de la inteligencia artificial generativa en la evolución del sector energético? ¿Hay nuevas aplicaciones que esperan explorar?
En mi opinión, el sector energético puede evolucionar con la ayuda de la inteligencia artificial generativa. A modo de ejemplo, esta puede contribuir a aumentar la eficiencia y la sostenibilidad de los procesos, así como a innovar en nuevas tecnologías y soluciones para el sector. Basándonos en la literatura, se están explorando muchas aplicaciones novedosas, como el uso de la IA generativa para maximizar la producción de energía renovable, mejorar el control de la red eléctrica y desarrollar nuevos materiales y tecnologías para el almacenamiento de energía. Solo llevamos un año de uso de esta tecnología en Repsol, por lo que esperamos que algunas de estas ideas sean pronto una realidad.
Julia, para cerrar nuestra conversación, ¿cómo describiría el valor que la inteligencia artificial generativa aporta a los accionistas minoristas de Repsol? ¿Qué aspectos deberían entender como claves para el futuro de la compañía?
La inteligencia artificial generativa puede ayudar a Repsol a ser más eficiente y más competitiva, lo que genera más beneficios y valor para los accionistas minoristas, que seguro entienden que la innovación y las nuevas tecnologías son fundamentales para el futuro de la compañía.
Frente a los fraudes con IA generativa
En un contexto donde el fraude cibernético crece continuamente, es crucial que los usuarios, y especialmente los accionistas de una compañía como Repsol, adopten medidas preventivas para no ser víctimas de ciberdelincuentes que utilizan la inteligencia artificial de forma delictiva.
La suplantación de identidad es una práctica común, mediante la creación de sitios web falsos o el envío de correos fraudulentos que imitan la imagen corporativa de grandes empresas para engañar a los usuarios. Por eso, es vital desconfiar de correos que solicitan información personal, proponen ofertas de trabajo irreales o exigen pagos a través de proveedores no reconocidos.
En este sentido, se recomienda verificar siempre la autenticidad de los canales digitales antes de proporcionar cualquier dato, y en caso de duda, contactar directamente con los servicios de atención al cliente de la compañía. Además, es fundamental recordar que Repsol no ofrece plataformas de inversión ni realiza remuneraciones digitales. Cualquier comunicación que imite al equipo directivo y ofrezca tales servicios es fraudulenta.
¿Otras buenas pautas? Evitar proporcionar datos personales o financieros en formularios online de fuentes no oficiales o de redes sociales. Desconfiar de solicitudes inusuales de pagos y verificar siempre la legitimidad de los contactos a través de medios oficiales. En caso de recibir solicitudes sospechosas, contactar directamente con el interlocutor habitual en Repsol o utilizar el formulario de contacto oficial para confirmar la veracidad de la información.
La precaución y la verificación constante son claves para protegerse contra el fraude cibernético.