Acción y dividendo: innovación y retribución al accionista en el corazón de la estrategia de Repsol

A lo largo del mes de julio, se han producido dos hechos relevantes para los accionistas de Repsol. El primero de ellos fue la recepción el día 8 de un dividendo complementario de 0,5 euros brutos por acción, reflejo de la solidez financiera de la compañía y de la estrategia de retribución continua a sus accionistas, aspecto que se destacó en la última Junta General de Accionistas (JGA), celebrada el pasado 10 de mayo. 
 
En dicha Junta, se tomaron decisiones significativas que no sólo aseguran un rendimiento financiero atractivo para los accionistas, sino que también promueven el crecimiento sostenible a largo plazo. En este sentido, se aprobó un segundo pago de dividendos de 0,45 euros brutos por acción, que se efectuará en enero de 2025, una muestra de la confianza de Repsol en su proyección financiera futura.

En la JGA se tomaron decisiones significativas que no sólo aseguran un rendimiento financiero atractivo para los accionistas, sino que también promueven el crecimiento sostenible a largo plazo
 

Por otro lado, el 12 de julio Repsol ejecutó una reducción de capital de 40 millones de euros mediante la amortización de 40 millones de acciones propias de un euro de valor nominal cada una de ellas (35 millones de acciones propias adquiridas en virtud del Programa de Recompra y 5 millones de acciones propias comprendidas en la autocartera a 21 de febrero de 2024), que representan el 3,29% del capital social previo a la reducción de capital.

El capital social de la sociedad resultante de la reducción ha quedado fijado en 1.177.396.053 euros, correspondientes a 1.177.396.053 acciones de un euro de valor nominal cada una.

El objetivo de una recompra y amortización de acciones es reducir el número de títulos en circulación de la empresa. Tras esta operación, el valor tangible de la compañía sigue siendo el mismo. Al dividirse ahora entre un número de acciones menor, cada una de esas participaciones representa una mayor porción de la compañía en manos de los accionistas que antes de la recompra.

Mensajes de la Junta General de Accionistas
 

Los resultados del primer trimestre de 2024 muestran cómo Repsol ha mantenido su capacidad para adaptarse a un mercado energético global en constante cambio, que subraya además su fortaleza y resiliencia. "Nuestro comienzo de año demuestra la solidez del proyecto de Repsol, que dará un nuevo paso adelante gracias a la Actualización Estratégica 2024-2027", comentó en este sentido Josu Jon Imaz, consejero delegado de Repsol, durante la JGA. 

Antonio Brufau, presidente de Repsol, destacó durante su intervención la necesidad urgente de implementar políticas que fortalezcan la competitividad de la industria europea: "Defendemos una transición energética lo más eficiente y acelerada posible, que sirva de base para la reindustrialización de Europa". Este enfoque subraya la visión de la compañía sobre la importancia de equilibrar el proceso de descarbonización con el crecimiento industrial y la competitividad.

La estrategia de Repsol para el período 2024-2027 se centra en un crecimiento rentable y en el avance de su transición hacia una energía más limpia, con una inversión prevista de entre 16.000 y 19.000 millones de euros, lo que refuerza su liderazgo en el sector de las energías bajas en carbono.

Además, Repsol ha iniciado la producción a gran escala de combustibles renovables en su nueva planta de Cartagena y ha fortalecido alianzas estratégicas importantes, como la firmada con la empresa Bunge.

Josu Jon Imaz también destacó la orientación futura de Repsol en la transición energética: "Continuaremos ofreciendo todas las formas de energía que la sociedad necesita, de manera competitiva y, cada vez, más sostenible y descarbonizada".
 

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