Paradores, nuestro patrimonio

Con vuestras propuestas, nos habéis hecho viajar con la imaginación a fantásticos paradores a lo largo de toda la geografía española. Estos son los ganadores de un fin de semana en Paradores. ¡Gracias a todos por vuestra participación!

Parador de Cardona

JUAN LUIS ANGULO SÁNCHEZ

Mi parador favorito es el de Cardona, ya que, aparte de las vicisitudes que ha pasado en su historia, está muy bien rehabilitado, conservando bastantes instalaciones originales. Realizan visitas organizadas a las partes visitables del recinto. Además, la población de Cardona ha sabido incorporar al Parador visitas turísticas de la población, donde también van narrando la historia. Para acabar de completar un fin de semana, uno no se puede perder la visita a las minas de sal. Todas las visitas están muy bien organizadas a través de la oficina de información de Cardona y del propio Parador. Creo que es un Parador en el que tienes muchas actividades, buena gastronomía, excelente hospedaje y, además, como colofón, un fantasma que se aparece a algunos visitantes.

Parador de Corias, en Cangas del Narcea, Asturias

FRANCISCO LUIS PONCE DE LEÓN

Reconozco que es difícil elegir un Parador entre todos los que forman parte de esta red de magníficos hoteles de España, así que permitidme mostraros uno de los, creo yo, más desconocidos: el Parador de Corias, en Cangas del Narcea (Asturias). Y digo desconocido porque los lugareños piensan que este impresionante paisaje está aún por descubrir. Entre montañas pobladas de diversos árboles y viñedos (sí, viñedos en Asturias), se desliza el río Narcea por la ruta del vino hasta llegar a este enorme Parador, antes monasterio, que mantiene una iglesia del siglo XI, con tallas de diversas épocas, que nos dejan el recuerdo de otros tiempos, y con un gran patrimonio artístico a nuestro alcance. Su entorno, con el puente medieval y el viejo molino pendiente de restaurar, nos muestra caminos de senderismo por recorrer hasta llegar a los antiguos Palacios de Cangas del Narcea, de diferentes estilos. En este lugar, amigos de los Paradores, encontraréis descanso y, de verdad, la amabilidad de sus paisanos, a los que podréis preguntar todo lo que necesitéis para conocer mejor toda la comarca.