Acción y dividendo: fortaleciendo el compromiso con los accionistas de Repsol
Repsol continúa apostando por la rentabilidad para sus accionistas en el marco de su Actualización Estratégica 2024-2027, un plan que apunta a consolidar el liderazgo de la compañía en la transición energética a la vez que asegura su crecimiento. La compañía anunció que en enero de 2025 los accionistas recibirán una retribución de 0,475 euros brutos por acción. Este dividendo representa un incremento del 30% respecto al año anterior y refleja una política clara de creación de valor y confianza para los accionistas.
El pago de esta retribución está programado para el 14 de enero de 2025, y los accionistas con derecho a percibirlo se determinarán según el siguiente calendario: el último día para negociar las acciones con derecho al dividendo será el 9 de enero, a partir del 10 de enero cotizarán sin derecho a dividendo, y el 13 de enero se registrarán los accionistas que recibirán el pago.
Este dividendo representa un incremento del 30% respecto al año anterior y refleja una política clara de creación de valor y confianza para los accionistas
En línea con su estrategia de retribución al accionista, Repsol ha concluido recientemente un programa de recompra de acciones, adquiriendo y amortizando 20 millones de títulos propios, equivalentes al 1,70% de su capital social. Esta operación, finalizada antes del 31 de diciembre de 2024, ha reducido el capital social de la compañía a 1.157.396.053 euros, distribuidos en igual número de acciones de un euro de valor nominal cada una.
Estas iniciativas se suman a la amortización de 40 millones de acciones realizada en julio, que representaba el 3,29% del capital social en ese momento. Con estas operaciones, Repsol ha destinado en 2024 un total de 1.700 millones de euros a la remuneración de sus accionistas, combinando dividendos en efectivo y programas de recompra y amortización de acciones.
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