Cinco recetas para ahorrar cocinando con el microondas

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El microondas es la cenicienta de los electrodomésticos. Lo tenemos relegado en una esquina de la cocina a realizar tareas de pinche, como calentar líquidos o recalentar comidas ya preparadas (sean estas caseras o no). Pero lo cierto es que este particular horno, inventado por serendipia en 1945, está ya más que listo para dar el salto hacia preparaciones más elaboradas y sabrosas. 

Además, según el Instituto de Diversificación y Ahorro de Energía (IDAE), el microondas consume entre un 60% y un 70% menos que un horno convencional. Sea por abaratar la factura eléctrica o por gusto, el uso de este horno se puede convertir en un importante comodín en (casi) cualquier receta culinaria. 

Ha llegado el momento de prestarle atención y explorar todas sus posibilidades, atendiendo también a sus particulares limitaciones. La fundamental es evitar ponerlo en funcionamiento con cualquier tipo de metal dentro. Luego, se puede optar por recipientes de loza o de cristal, sobre todo si están específicamente diseñados para su uso en este tipo de hornos. O los consabidos utensilios de silicona que añaden algunas posibilidades más al cocinado.

 

Esparragos

Huevos fritos sin sartén

La del huevo y el microondas es una relación de amor-odio. En redes sociales como Youtube se pueden encontrar vídeos que dan cuenta del estropicio a que da lugar despropósitos como querer hervir un huevo duro en su propia cáscara (acabará explotando). Sin embargo, hacerlo frito al micro sí es fácil y factible. Basta con poner aceite de oliva virgen extra en un bol de cristal o loza. Se casca el huevo en el recipiente y salpimentamos al gusto. Tapamos con un plato y lo dejamos 40 segundos a 800W de potencia. Ideal como acompañamiento sano de ensaladas o para desayunos rápidos. Si se quiere añadir unas tiras de bacon, se pueden hacer envueltas en dos o tres capas de papel de cocina (que absorberán la grasa), durante unos 3 minutos a máxima potencia.

 

Chocolate

Calabaza tres quesos

Cocinar verdura en el microondas ofrece resultados sorprendentes, a medio camino entre el leve velo de sabor de las preparaciones hervidas o al vapor y la intensidad tostada y sabrosa del horno convencional. En este caso, hemos elegido como protagonista una calabaza de temporada, mejor redonda, a la que cortamos la tapadera y vaciamos de semillas. Introducimos en un recipiente hondo, tapamos con un plato y cocinamos entre 5 y 10 minutos a máxima potencia, en función de su tamaño. Sacamos y rellenamos con un sofrito de cebolla, puerro y zanahoria, y sumamos los tres quesos: mozzarella, gorgonzola y parmesano. Dar otros 5 minutos para terminar de cocinar en el microondas.

 

Borsch

Dorada a la sal

Una red flag del microondas es el cocinado de carnes, que suelen acabar resecas y gomosas. No así los pescados, que tienen en este electrodoméstico un gran aliado. Una receta de dorada a la sal es más propia del horno convencional, pero también podemos aprovechar parte de su encanto en este electrodoméstico ahorrador. Se coloca el pez en una cama de sal y añadimos hasta cubrir. Humedecemos un poco y apelmazamos con las manos. Introducimos el recipiente en el microondas, a máxima potencia, entre unos 8 o 10 minutos (en función del tamaño). Dejaremos reposar 2 minutos antes de rescatarla de su sarcófago de sal.

 

Aguacate

Crema de patata, castañas y setas

Los tubérculos son especialmente agradecidos a la hora de cocinarlos con el microondas. Pero ¿y otros productos de temporada como las castañas? Para hacerlas, hay que dar un corte en la piel que permita salir el agua en forma de vapor. Unos dos minutos a máxima potencia bastará para hacer una docena. Pelar y reservar. Cortar en cuadritos dos patatas medianas y cocinarlas 10 minutos en el microondas. En un recipiente para batir, sumar las castañas, las patatas, un puerro sofrito previamente y un vaso de leche. Decora con lascas de setas tostadas en sartén y un chorro de aceite de oliva virgen extra. 

 

Castañas

Flan de galleta

Los postres de microondas se han hecho populares en internet, sobre todo algunas recetas de cupcake para hacer en taza. Pero hay otras posibilidades más tradicionales, como este flan o pudin que gustará a todos. Pintamos un molde tipo bavaresa con caramelo líquido, que podemos haber hecho también en el micro (con 150 g de azúcar, medio vaso de agua y un chorrito de zumo de limón; 5 minutos a máxima potencia). Volcamos en el molde una mezcla batida de dos huevos, 200 g de azúcar, 500 ml de leche y veinte galletas tipo María. Introducimos en el microondas durante 15 minutos a máxima potencia. Hay que pinchar con una varilla para comprobar que está cocinado. Se puede decorar, como en la imagen, con una mermelada de frutos rojos... ¡y a disfrutar!